Aunque la purga no es más intensa cuando se aíslan colores individuales, sí que se ahorra tinta.
Si alguna válvula purgadora queda cerrada, no habrá presión de vacío para retener la tinta, que escurrirá por el cabezal. En caso de imprimir con las válvulas purgadoras abiertas, aparecerán gotas de tinta en el material.